¿Cómo derrotar al síndrome del impostor?

¿Alguna vez has sentido que no puedes cumplir tus responsabilidades diarias? ¿Has tenido éxito en algo, pero sientes que no te lo mereces? ¿Sientes que constantemente engañas a la gente y que en cualquier momento te descubrirán como un fraude? 

Hoy hablaremos de un villano que nos acecha a todos en algún momento de nuestras vidas: el síndrome del impostor. Se trata de un sentimiento que nos hace creer que somos un fraude, que no estamos a la altura y que no merecemos los elogios que recibimos. Pero, tranquilo, ¡no estás solo en esto!  

En este artículo veremos cuál es la conexión entre dos cosas que al parecer no tienen nada que ver: los superhéroes y el síndrome del impostor. 

¿Qué es el síndrome del impostor? 

El síndrome del impostor es esa constante sensación de no ser suficientemente buenos en lo que hacemos y de no estar a la altura de nuestras propias expectativas. 

“Nos avergonzamos de los elogios y sentimos que no merecemos las felicitaciones porque creemos que no hemos trabajado lo suficiente o no somos lo suficientemente buenos”. Así lo afirma Alejandra Marco, coach argentina que ha estudiado el síndrome del impostor durante más de diez años, en el episodio 9 de nuestro pódcast A dos grados. 

De hecho, este síndrome es más común de lo que parece. Según el informe de Asana, alrededor del 62% entre 9.000 trabajadores encuestados admitieron haber experimentado el síndrome del impostor.  

¿Qué tenemos en común los humanos con los superhéroes? 

Si alguna vez te preguntaste si tu superhéroe favorito también puede sufrir el síndrome del impostor, la respuesta es sí.  Hasta los superhumanos de los cómics y las películas sienten el peso del síndrome del impostor. Incluso personajes tan poderosos como ellos experimentan esa sensación de insuficiencia y temor a ser “unos fraudes”.  Un ejemplo de esto es Peter Parker, mejor conocido como Spiderman. De acuerdo con Juan Dapo, aficionado a los cómics y creador del pódcast Estúpido nerd, este personaje tiene que lidiar con muchos problemas personales:  

• En su trabajo no le pagan bien 

• Su vida amorosa es un desastre 

• Está estresado por mantener su identidad secreta 

• Siente la presión de salvar vidas 

Estos problemas hacen de Peter Parker uno de los superhéroes más realistas de Marvel. Esa sensación de Spiderman de no estar a la altura, de ocultar una verdadera identidad y de estar presionado por tener que hacerlo todo solo es algo que le puede pasar a cualquiera.  Veamos qué compartimos con nuestros superhéroes favoritos:  

Los superhéroes también sienten que las cosas no le salen bien 

La vida de un superhéroe no es muy diferente de la nuestra. También enfrentan las inseguridades de una persona común y las dudas sobre si cumplen su deber de la mejor manera. Como explica Alejandra Marco en el episodio 9, el síndrome del impostor no está necesariamente vinculado a una baja autoestima. Incluso las personas con una autoestima positiva pueden experimentarlo.  Un ejemplo notable es Superman: con sus increíbles poderes y su autosuficiencia, se siente frustrado cuando no puede salvar a todos o no puede inspirar el cambio que desea ver en el mundo. Todos tenemos momentos en los que nos sentimos insuficientes, pero es esencial aprender a manejar ese sentimiento y no dejar que se convierta en un villano en nuestra vida. 

Los superhéroes dudan de sí mismo y se sobresfuerzan 

Como humanos, dudamos y nos esforzamos por hacer lo correcto. Y como nadie es perfecto, esta lucha interna es común a mucha gente. Incluso los superhéroes enfrentan desafíos en sus propias vidas y tienen momentos en los que se sienten como impostores. H3 Los superhéroes tienen expectativas personales muy altas Los superhéroes enfrentan a menudo expectativas muy altas en cuanto a su capacidad para salvar el mundo y hacerlo sin cometer errores.  

• Esto es similar a cómo algunas personas se imponen expectativas poco realistas en sus vidas, ya sea en su carrera, sus relaciones o sus logros personales.  

• La brecha entre estas expectativas y la realidad puede llevar a sentimientos de insuficiencia y al síndrome del impostor. 

Cómo combatir el síndrome del impostor 

El síndrome del impostor no solo afecta a los superhéroes ficticios; también es un desafío real en la vida cotidiana. A menudo nos enfrentamos a demandas laborales exigentes que nos llevan a sentirnos agotados.  En Colombia esto le pasa a muchos: entre el 20% y el 33% de los trabajadores experimentan niveles significativos de estrés y ansiedad laboral, de acuerdo con la más reciente Encuesta Nacional de Condiciones de Salud y Trabajo. La era digital es también un factor que contribuye a esa ansiedad. El uso de Instagram y otras redes sociales ha llevado a que las personas se sientan mal con su imagen y su autoestima, porque se comparan e idealizan lo que ven en redes. Pero no te preocupes. Así como los superhéroes cuentan con aliados para luchar contra los villanos, nosotros también encontramos formas de combatir el síndrome del impostor. Veamos cómo: H3 Identifica el síndrome:  El primer paso para combatir el síndrome del impostor es reconocerlo.  

• Presta atención a tus pensamientos y sentimientos internos. Si sientes constantemente que no mereces tus logros, que tienes falsa identidad y que en cualquier momento te descubrirán, es probable que experimentes este síndrome. 

Habla de ello con otros:  

Compartir tus sentimientos y preocupaciones con amigos, familiares o colegas puede ayudarte a darte cuenta de que no estás solo en esto y que a todos nos puede pasar. 

Acepta los elogios:  

“Las personas que luchan contra el síndrome del impostor tienden a minimizar sus logros y no aceptan elogios”. Si cambias esta dinámica, dice Alejandra Maco, puedes reforzar la seguridad en ti mismo y hacerle frente al impostor. 

• Cuando alguien te felicite o te elogie por tus logros, en lugar de restarle importancia, agradece y acepta el reconocimiento. Esto te ayudará a construir una autoimagen más positiva. 

Cambia tu diálogo interno:  

Observa la forma en que te hablas a ti mismo.  

• Si te encuentras autodenigrándote o descalificando tus logros, comienza a cambiar ese diálogo.  

• En lugar de decirte a ti mismo que no eres lo suficientemente bueno o que no mereces el éxito, practica un diálogo más positivo y constructivo. 

• Trabaja en cada piso de tu pirámide de autoestima: autoconocimiento, autoconcepto, autoevaluación, autoaceptación, autorrespeto, autorrealización. 

Aprender a abrazar las imperfecciones:  

A lo largo de sus luchas, los superhéroes aprenden a aceptar sus imperfecciones y errores como parte de su crecimiento y desarrollo. En lugar de castigarte por los errores, perdónate a ti mismo y utiliza esas experiencias como oportunidades de aprendizaje. 

Establece metas realistas 

A menudo, el síndrome del impostor se manifiesta cuando te pones expectativas personales poco realistas. Aprende a fijarte metas alcanzables y realistas. Celebrar tus logros, incluso los pequeños, te ayudará a ganar confianza en ti mismo.  

Conclusión 

El síndrome del impostor es un villano común en nuestras vidas, pero también puede ser un aliado. Si identificamos y cambiamos nuestro diálogo interno, podemos aprender a utilizarlo como una herramienta para impulsarnos a ser la mejor versión de nosotros mismos.  Incluso los superhéroes, con todos sus poderes, no son inmunes a este sentimiento. Al final, la clave es no rendirse y recordar que, como en los cómics, la vida puede ser una lucha constante, pero solo los héroes que perseveran pueden superar a sus villanos. 

Puntos clave  

• El síndrome del impostor es sentir que eres un fraude y que no cumples las expectativas. Todos podemos sentirnos así en algún momento. 

• Si aprendemos a cambiar nuestra forma de hablarnos a nosotros mismos, podemos motivarnos a ser mejores. Esto nos ayudará a superar la sensación de ser un impostor y a ganar confianza en lo que podemos hacer. 

• Incluso los superhéroes famosos de los cómics y las películas, con todas sus habilidades especiales, también sienten que no son lo suficientemente buenos. Esto nos muestra que la lucha contra el síndrome del impostor es algo que todos podemos entender y trabajar para superar.