Bancolombia pone a las personas en el centro de su estrategia, impulsando sostenibilidad y liderazgo con propósito desde el respeto por los derechos humanos. Descubre cómo el talento se convierte en ventaja competitiva. Lee más.
En la mitología griega, Prometeo desafió a Zeus para entregar a la humanidad un regalo invaluable: el fuego. No solo les dio calor, sino también la posibilidad de crear herramientas, cocinar alimentos, construir ciudades y, en última instancia, formar comunidades que impulsaran el progreso.
En el mundo empresarial actual, donde las organizaciones debemos generar no solo resultados económicos, sino también impactos responsables y en armonía con la sociedad, los líderes debemos, como Prometeo, encender el fuego de una cultura centrada en las personas, en la que los derechos humanos no sean una estrategia de marketing, sino el eje fundamental y el criterio orientador de la vida corporativa.
Esto exige coraje y valentía gerencial para renunciar a resultados de corto plazo y superar la inercia de prácticas insostenibles que desconocen al ser humano como razón de ser del desarrollo empresarial. Asumir este reto abre la puerta a grandes oportunidades, entre ellas, atraer el talento necesario para enfrentar un entorno cambiante, construir confianza y reputación social, fomentar la innovación a través de la diversidad, y alcanzar la sostenibilidad mediante la verdadera ventaja competitiva de cualquier industria: el talento.
En Bancolombia, el respeto por los derechos humanos es el corazón de nuestra estrategia y la convicción que guía nuestro actuar. Se refleja en nuestras prácticas de gobierno y en cada decisión que tomamos. Trabajamos para que, junto con los desafíos del contexto y del mercado, el talento humano sea nuestra mayor ventaja competitiva. Un talento que impulsa resultados destacados y sostenibles para el desarrollo económico y social de los países donde tenemos presencia.
El respeto por la dignidad humana es el filtro a través del cual analizamos nuestras decisiones, definimos nuestras políticas y gestionamos nuestro talento.
“En esta organización, las personas no son un medio para alcanzar resultados económicos: son el centro de todo lo que hacemos y, por eso, construimos día a día las condiciones necesarias para respetar los derechos humanos y la dignidad individual, desde la diversidad y la inclusión”.
Diana Giraldo Mejía, directora de Relacionamiento Humano de BancolombiaPromovemos entornos donde cada persona pueda desarrollar su proyecto de vida en armonía con nuestra cultura, desplegar su potencial y, al mismo tiempo, ser consciente de su responsabilidad de respetar y cuidar los derechos de quienes lo rodean: compañeros, equipos de trabajo y grupos de interés.
Los resultados del negocio son posibles, destacados y sostenibles gracias a la mentalidad de nuestros colaboradores. Su capacidad de adaptación y aprendizaje continuo permiten ajustar la estrategia organizacional de acuerdo con las exigencias y retos del entorno.
Desde nuestra estrategia de talento, promovemos la flexibilidad, la innovación y el compromiso. Como lo señala Harvard Business School Online (2023), “un alto compromiso de los empleados puede aumentar la rentabilidad de una empresa hasta en un 23 %.”
Ser parte de una organización como la nuestra genera un profundo sentido de logro y contribución. Las personas se sienten parte activa de un propósito superior, lo que fortalece su desarrollo personal, compromiso y conexión emocional con el Banco.
Esta conexión se convierte en una fuerza impulsora de mejores resultados, una espiral positiva que impacta su empleabilidad, competitividad, bienestar individual, familiar y el progreso del país.
Cuando las personas reconocen que su entorno laboral les brinda seguridad psicológica, respeto por su dignidad y bienestar integral, su desempeño individual mejora. Y cuando ese desempeño se multiplica, el impacto en los resultados organizacionales es directo y exponencial.
Como líderes, hoy tenemos en nuestras manos la posibilidad de ofrecer a nuestras organizaciones algo más que resultados trimestrales. Podemos generar confianza, adaptabilidad y valor social sostenible a través de una cultura centrada en las personas.
Cuida a los otros de manera decidida, responsable y coherente… y los resultados se cuidarán solos.
