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Estar siempre ocupado parece ser sinónimo de productividad, por lo que descansar se siente a veces como un lujo. Pero, ¿y si te dijéramos que el descanso es clave para mejorar tu rendimiento y salud?
¿Alguna vez has sentido que, sin importar cuánto trabajes, nunca es suficiente? ¿Qué sucede cuando no equilibramos bien trabajo y descanso?
No todo puede tener la misma importancia porque si todo es importante, nada es importante». Esto nos comenta en nuestro pódcast A dos grados Jana Fernández, experta en fisiología del sueño y autora del libro Aprende a descansar.
Esta reflexión nos invita a reconsiderar nuestras prioridades diarias. Así evitamos caer en la trampa de estar siempre ocupados, lo que además confundimos muchas veces con productividad y eficiencia.
No descansar lo suficiente puede tener consecuencias graves. La falta de sueño y el cansancio constante pueden traer una serie de problemas de salud (físicos, mentales y emocionales), explica Jana.
Curiosamente, muchos sacrifican el descanso para hacer más cosas y “ser más productivos”. Pero este hábito en realidad disminuye nuestra eficiencia en el trabajo.
«Yo precisamente era de esas personas que creían que para qué iba a dormir y descansar, si podía estar trabajando y produciendo, ganando más dinero y haciendo muchas más cosas», confesó Jana. Pero esta forma de pensar la llevó a un agotamiento extremo y a sufrir de depresión.
Muchas veces no le damos al descanso la importancia que merece y pensamos que solo influye en nuestro humor o niveles de estrés en el trabajo. Pero la verdad va mucho más allá. El exceso de trabajo y un descanso insuficiente no solo agota tu mente, sino que también puede causar serios problemas de salud.
Jana compartió su propia lucha contra el agotamiento, que afectó su salud física. «Tenía que trabajar unos desajustes que tenía en mi colesterol, en mi ácido úrico, en un montón de indicadores», afirmó.
Su experiencia muestra la conexión cuerpo-mente, y cómo descuidar uno puede afectar gravemente al otro. La ciencia lo confirma. No dormir lo suficiente aumenta el riesgo de enfermedades del corazón, problemas renales y accidentes cerebrovasculares, según el National Heart, Lung, and Blood Institute.
En definitiva, tomarte un tiempo para descansar no es solo un capricho, sino una necesidad para tu salud.
En el día a día, encontrar tiempo para descansar puede parecer difícil entre tantas tareas, pero con algo de planificación y organización es posible.
Descubre cómo puedes organizar tu jornada para que completar tus actividades y encontrar momentos para tomar aire y recargar energías. 👇
¿Te ha pasado que terminas el día frustrado porque no completaste todas tus tareas? Para evitar esto, Jana nos da un consejo de oro: considera las horas que tardas en ejecutar cada cosa. En lugar de solo listar tareas, calcula cuánto tiempo te tomará cada una. Define horas para cada actividad, así repartes mejor tus tareas durante el día. Además, ajustas tus expectativas a la realidad y evitas esa sensación de derrota al final del día.
Aquí el truco está en no tratar todo como si fuera una emergencia. Pregúntate: ¿realmente necesitas hacer eso ahora o puedes esperar? Al identificar qué tareas son urgentes y cuáles son importantes, evitas correr todo el día como si el mundo se fuera a acabar.
Reflexiona: ¿Qué es algo urgente en tu día a día? Tal vez, pagar tu recibo del agua porque estás a un día de que te la corten. Pero adelantar tu presentación de trabajo agendada para la semana que viene no es algo urgente, aunque sí importante.
¿Si ves la diferencia? No todo lo debemos hacer ya. Si no aprendemos a clasificar las cosas según sus niveles de prioridad siempre estaremos ocupados y ansiosos.
Una de las claves para manejar mejor tu tiempo es ser flexible con tus planes. Aunque tengas todo organizado, siempre pueden surgir imprevistos.
¿Tu hermano necesita un favor urgente? ¿Tu mascota se enfermó? En lugar de estresarte cuando algo no sale como esperabas en el día o en la semana, intenta adaptarte a la situación.
Por ejemplo, si planeaste tomar un café a las 11 de la mañana como un momento de descanso, pero algo urgente ocurre justo a esa hora, está bien reprogramar ese descanso para más tarde. Lo importante es que no elimines esa pausa, acomódala en otro espacio que tengas libre durante el día.
Al tomarte ese momento de pausa, dedícalo de verdad a descansar. Si tu plan es disfrutar de un café en el balcón, haz exactamente eso y nada más durante esos minutos. O si decides sentarte en el sofá, regálate esos cinco minutos solo para ti, sin distracciones.
Aprovechar plenamente estos pequeños descansos revitaliza tu día más de lo que imaginas.
Define un horario regular de sueño: intenta acostarte y levantarte a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana o en vacaciones. Mantener un horario regular ayuda a que tu cuerpo cuente con un ritmo circadiano saludable, lo que facilita tanto el quedarte dormido como el despertarte fresco.
Tómate pausas breves durante el día: no subestimes el poder de una pausa de cinco minutos. Si es posible, sal a recibir un poco de luz natural. Estos pequeños descansos pueden disminuir tu nivel de estrés y aumentar tu energía. Es como presionar el botón de reset en tu cerebro.
Reduce el drama: aprender a no dramatizar cada contratiempo puede mejorar mucho tu bienestar mental. Si te enfrentas a un problema, trata de verlo en perspectiva. Así podrás reducir la ansiedad, controlar tus reacciones y conservar energía para lo realmente importante.
Tip extra: ¡busca nuevas formas de relajarte! no tienes que ser un monje budista para alcanzar la iluminación y la tranquilidad. Hay cosas pequeñas que te pueden ayudar.
La próxima vez que pienses en ver algo en Netflix antes de dormir, ¿por qué no pruebas algo diferente como la Guía Headspace para la meditación? Este contenido está diseñado para quienes inician en el mundo de la meditación, por lo que es fácil de seguir. Además, cada episodio te guía a través de ejercicios de meditación que puedes hacer en cualquier lugar. Es una forma fantástica de hacer una pausa y cuidar de tu bienestar mental.
Descansar bien es tan importante como trabajar duro. No se trata solo de recargar energías, sino que es clave para ser más productivo de verdad.
Logra que esto funcione para ti. Prioriza tu tiempo de descanso igual que tus tareas importantes. Esto significa tomar pausas conscientes, planificar tu tiempo de sueño como si fuera una reunión y ajustar tu rutina para que el descanso sea parte de tu día a día. De este modo, no solo te sentirás mejor, sino que tu trabajo también mejorará.
El descanso no es perder tiempo, es invertir en tu capacidad de pensar, crear y producir. Cuando manejas bien tus momentos de relajación, garantizas que cada hora en el trabajo cuente más.
Fuentes
Pódcast Episodio 19: Descubre por qué hacer más no te hace mejor.
Correa, A. Por qué la ‘Guía Headspace para la meditación’ de Netflix es justo lo que necesitamos en 2021. Vogue. https://www.vogue.es/living/articulos/guia-headspace-meditacion-netflix
Un área de Recursos Humanos (RRHH) debe transformarse e innovar a la par que lo hace el resto de la compañía. De esta área depende el capital humano que moverá a una empresa camino al éxito y la competitividad.
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