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Al comprar tu casa nueva, verifica su estado general al recibirla. Asegúrate de inspeccionar cada rincón y revisar con lupa el contrato de tu compra de modo que protejan tus derechos como consumidor. ¡Así disfrutarás tu nuevo hogar sin preocupaciones!
Verifica que la vivienda cuente con todas las instalaciones, conexiones y servicios públicos establecidos en el contrato. Esto incluye sistemas eléctricos, de fontanería, calefacción y refrigeración. La inspección de las áreas comunes también es un aspecto crucial al comprar una vivienda nueva, ya que estas áreas pueden influir en tu calidad de vida y el valor de tu inversión.
El sueño de tener una vivienda nueva sigue siendo una de las metas más anheladas de las familias colombianas.
Estrenar casa es una emocionante aventura y es esencial que conozcas los aspectos clave a evaluar tanto al firmar el contrato como al recibir tu nueva propiedad. Tener la información clave te permitirá disfrutar de este proceso con confianza y seguridad.
De hecho, un artículo sobre la protección al consumidor inmobiliario, elaborado por el Grupo de Investigación en Derecho Privado de la Universidad Militar Nueva Granada, señala: “La importancia de la protección al consumidor en la fase de tratos previos o tratativas está dada por la asimetría informativa entre el constructor y el consumidor”.
¿Qué significa esto? Que las inmobiliarias y las constructoras tienen más experiencia y conocimiento que tú, lo que hace que estés en desventaja si no cuentas con una correcta asesoría.
Por eso, en Tu360Inmobiliario te compartimos en modo “lista de chequeo” las cosas más importantes que debes revisar al recibir tu inmueble, desde inspeccionar la estructura hasta entender bien el contrato y el acta de entrega de tu vivienda nueva. Vamos a ello (puedes descargar la lista en Excel a continuación para que lleves tu control. Te invitamos a profundizar cada punto del listado con este contenido):
[ ↓ D e s c a r g a r ]: Descarga la lista de chequeo en Excel y llénala en el proceso: antes y durante la entrega de tu vivienda
Para asegurarte de que recibes lo que compraste, revisa cuidadosamente el contrato. Como comprador necesitas tener claros los términos, plazos de pago y responsabilidades tanto de quien vende como de quien compra.
Es recomendable que cuentes con la asistencia de un abogado especializado en bienes raíces. Si tienes dudas, pregunta a tu asesor legal para evitar malentendidos y asegurarte de que todo quede registrado en el acta de entrega del inmueble.
Para darte una visión inicial, estos son algunos aspectos que debes tener en cuenta en la lectura del contrato:
Descripción de la propiedad (especificaciones arquitectónicas, técnicas y estructurales de la vivienda).
Precio de compra.
Condiciones y cláusulas especiales.
Inventario de bienes incluidos.
Garantías y reparaciones.
Costos y gastos (impuestos, comisiones y tasas de transferencia).
Penalizaciones.
Certificado de existencia y habitabilidad: uno de los documentos clave que debes solicitar es el "Certificado de Habitabilidad" emitido por la alcaldía local. Este certificado confirma que la vivienda cumple los estándares de habitabilidad y es segura para habitar. Asegúrate de que el proyecto cuente con este certificado.
Licencia de construcción: verifica que el proyecto tenga una licencia de construcción válida y actualizada emitida por la autoridad local correspondiente. Esta licencia demuestra que el proyecto cumple las regulaciones de zonificación y construcción.
Título de la propiedad: las escrituras y el título de propiedad son documentos legales que formalizan la transferencia de bienes del vendedor (la constructora) al comprador (tú). Se valida en la notaría al momento de firmar tu documentación.
Reglamento de propiedad horizontal: revisa si la propiedad cuenta con un reglamento de propiedad horizontal. Esto implicaría que tú, como dueño, deberás cumplir un conjunto de normas y regulaciones relacionadas con la administración del lugar. Aquí pueden incluirse cuotas de pagos de administración, mantenimiento de áreas comunes, entre otras.
Documentación técnica del proyecto: solicita los planos arquitectónicos y estructurales, y las especificaciones técnicas. Verifica que la distribución sea la que esperabas y que todas las áreas estén representadas.
Registro de la constructora inmobiliaria: confirma que la constructora está debidamente registrada y autorizada para operar en Colombia. Valídalo en la Superintendencia de Notariado y Registro.
Un encargo fiduciario es un acuerdo legal en el cual una parte (en este caso la constructora que vende la propiedad) coloca ciertos activos (como los pagos de los compradores) en manos de una entidad financiera o fiduciaria para garantizar que los fondos estén libres de riesgos. Esto es lo que se llama fideicomiso.
Como comprador, revisa que la constructora cuente con esta cláusula. Un encargo fiduciario es como un aval de que usarán bien tu dinero. En otras palabras, es una garantía de que los recursos se gestionarán adecuadamente y se utilizarán para el único propósito previsto: la construcción y entrega de tu propiedad.
Cuando adquieres una vivienda nueva, existen garantías y plazos que deben estar presentes en tu acta de entrega de inmueble.
Los detalles de cuánto dura la garantía varían según el proyecto, pero se suelen clasificar en:
Garantía estructural: cubre problemas importantes de la estructura de la vivienda, como cimientos, vigas, techos, etc. Esta garantía puede tener un plazo de varios años (diez a veinte).
Garantía general: cubre problemas no estructurales, como electricidad, fontanería, calefacción y otros sistemas internos. El plazo para esta garantía es generalmente de un año o más.
Es importante que sepas que en Colombia, como comprador, tienes derechos gracias al “Estatuto del consumidor”.
El Estatuto del consumidor existe para proteger y garantizar que los vendedores cumplan sus promesas. Recurre a él en caso de que se presenten daños o problemas no previstos en tu contrato de compraventa.
El marco legal de garantía de inmuebles nuevos en Colombia está constituido por la Ley 1480 de 2011 y el Decreto 735 de 2013.
Ahora que sabemos los aspectos legales, es el momento de inspeccionar minuciosamente la vivienda para asegurarte de que todo esté en perfecto estado. Veamos una lista de chequeo que incluye los elementos más importantes:
Lo primero es verificar que la vivienda cuente con todas las instalaciones, conexiones y servicios públicos establecidos en el contrato. Esto incluye sistemas eléctricos, de fontanería, calefacción y refrigeración:
Abre y cierra los grifos para comprobar la presión del agua.
Inspecciona el sistema de plomería: asegúrate de que no haya fugas en las tuberías y de que el sistema de drenaje esté en buen estado. Mira que el sistema de suministro de agua funcione sin problemas en todos los puntos de la vivienda.
Revisa el inodoro, el fregadero y la bañera para detectar problemas de drenaje.
Verifica que todos los interruptores, enchufes y luces funcionen correctamente.
Chequea que no haya cables eléctricos expuestos o problemas de cableado.
Comprueba que el sistema de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) funcione adecuadamente y distribuya el aire de manera uniforme.
Prueba el mesón, el horno y la campana extractora en busca de daños o problemas.
Verifica que todas las conexiones de red (cableado eléctrico y gas) estén correctamente instaladas y funcionan en todas las habitaciones.
Pregunta sobre los materiales que se utilizarán en la construcción (pisos, paredes, puertas y ventanas). Asegúrate de que sean de la calidad contratada y de que cumplan las normas de seguridad y construcción vigentes.
Inspecciona la calidad de los acabados en todas las áreas, como paredes, techos, suelos y carpintería.
Verifica que no haya grietas o daños en las paredes, los techos y los suelos.
Comprueba que las puertas y las ventanas se abran y se cierren correctamente.
Verifica que no haya humedad o filtraciones en ninguna parte del inmueble.
Chequea que haya una buena circulación de aire en todas las habitaciones.
Asegúrate (si tu contrato lo establece) de que los techos y las paredes están fabricados con propiedades de aislamiento acústico (para reducir el ruido del entorno exterior, por ejemplo): paneles de espuma acústica, paneles de yeso insonorizado o, en caso de las ventanas. vidrio laminado.
Verifica que existan sistemas de seguridad adecuados, como detectores de humo, extintores y alarmas de incendio, en cumplimiento con las regulaciones de seguridad.
En Tu360Inmobiliario Bancolombia trabajamos junto a Prosegur Alarms para ofrecerte un excelente sistema de alarmas antirrobo. Puedes obtener la instalación de forma gratuita si optas por el pago automático con una Tarjeta de Crédito Bancolombia.
La inspección de las áreas comunes también es un aspecto crucial al comprar una vivienda nueva. Estas áreas pueden influir en tu calidad de vida y en el valor de tu inversión.
Comprueba la limpieza y el mantenimiento general de la sala de recepción y los pasillos.
Verifica la existencia de sistemas de seguridad, como cámaras de vigilancia y sistemas de control de acceso.
Asegúrate de que todos los equipos de gimnasio estén en buen estado y funcionen correctamente.
Inspecciona el estado del agua en la piscina (si la hay) en busca de signos de contaminación, así como la presencia de salvavidas y señalización.
Revisa el estado de las salas de reuniones, los salones de fiestas y otras áreas comunes de entretenimiento.
Asegúrate de que tu estacionamiento, si lo tienes, esté en buenas condiciones, incluyendo la iluminación y la señalización.
Pregunta sobre los servicios adicionales, como servicio de lavandería o áreas de almacenamiento comunes, y verifica su disponibilidad y condiciones de uso.
Cuando te mudes a un nuevo conjunto residencial, recuerda investigar las políticas y regulaciones del lugar, que incluyen las cuotas de pago de administración, la disponibilidad de los servicios complementarios o a quién recurrir en caso de que exista algún problema dentro del complejo.
Ten en cuenta que puedes pagar la administración de tu vivienda en Tu360Inmobiliario. Es fácil: necesitas hacer tu pago con una cuenta activa de Wompi y nosotros nos encargamos de informarle al administrador de tu conjunto. Solo asegúrate de que tu unidad residencial cuenta con la solución de Tu360Inmobiliario Administraciones.
Si está dentro de tus posibilidades económicas, haz la inspección física junto con un inspector de viviendas profesional. No dudes en hacer preguntas al promotor inmobiliario para asegurarte de que estás tomando una decisión informada al comprar un nuevo proyecto.
Comprar una casa nueva es un hito importante. Verifica su estado general al recibirla. Esto incluye inspeccionar toda la propiedad y revisar detenidamente los términos de tu compra para proteger tus derechos como consumidor. Con una revisión adecuada, tanto de lo físico como de los temas legales, tendrás la tranquilidad para mudarte a tu propia casa.
Te puede interesar: ¿Cómo presupuestar el mantenimiento de tu casa? mira estas estrategias. Adicional, contrata a personas de confianza que te hagan los acabados en tu nueva vivienda.
Para asegurarte de que estás recibiendo lo que compras, revisa cuidadosamente el contrato. Como comprador, debes ser capaz de entender los términos, los plazos de pago y las responsabilidades de ambas partes.
Un encargo fiduciario es una garantía de que los recursos se gestionan adecuadamente y de que se utilizarán para el único propósito previsto: la construcción y entrega de tu propiedad.
El Estatuto del consumidor existe para protegerte y garantizar que los vendedores cumplan sus promesas. Recurre a él en caso de daños o problemas no previstos en tu contrato de compraventa.
Verifica que la vivienda cuente con todas las instalaciones, conexiones y servicios públicos establecidos en el contrato. Esto incluye sistemas eléctricos, de fontanería, calefacción y refrigeración. La inspección de las áreas comunes también es un aspecto crucial al comprar una vivienda nueva, ya que estas áreas pueden influir en tu calidad de vida y el valor de tu inversión.
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