Descubre cómo los proyectos de energía renovable impulsan la sostenibilidad en Colombia, transformando el futuro energético del país con innovación, impacto ambiental positivo y oportunidades para el desarrollo empresarial.

Colombia se ha establecido como un referente en la transición energética, gracias al ambicioso plan de expansión de su capacidad de generación basada en fuentes renovables no convencionales.
Para que el país logre cumplir esta meta con éxito, es clave hacer una adecuada gestión de todos los riesgos, especialmente los de mercado.
Uno de los mayores retos para las empresas y proyectos de generación de energía, son los ingresos. Es decir, la cantidad que se espera vender y el precio al que se hará. Por eso, las licitaciones (o procesos similares) en proyectos de generación de energías renovables -como la solar y eólica- son tan importantes, toda vez que allí se definen estos dos rubros.
De esta manera, para presentar una oferta competitiva en una licitación, los proyectos de energía solar y eólica, por ejemplo, deben evaluar rigurosamente su viabilidad financiera, incluyendo supuestos económicos realistas en su modelación, de tal forma que se encuentre una relación “riesgo – retorno” óptima.
Luego de presentar la oferta en la licitación y que esta sea aceptada por los compradores, la rigurosidad plasmada en el “Excel” debe cumplirse, ya que es la base financiera del proyecto. Es entonces -desde el momento de la aceptación de la oferta- que nacen dos riesgos de mercado importantes: el de tasa de cambio y el de tasa de interés, pues estos impactan directamente a la operación y la financiación, y por tanto, la viabilidad financiera del proyecto.
Es por ello que la fluctuación de estas dos variables de mercado debe ser considerada, pues son altamente volátiles y tienen un impacto significativo en la rentabilidad esperada y en el cumplimiento de los covenants. Sin embargo, hemos notado que la gestión de esos dos riesgos suele realizarse al momento del cierre financiero -el cual ocurre algunos meses después de la adjudicación- por lo que los inversionistas se exponen a la variabilidad de dichos elementos durante ese período.
Es importante que quienes definen la viabilidad financiera de los proyectos conozcan que las coberturas se pueden hacer desde el momento de la adjudicación, aumentando así la probabilidad de tener éxito financiero, y facilitando la consecución de los recursos necesarios para la construcción y operación del proyecto. Por ende, la gestión de estos riesgos financieros debería hacerse de la siguiente manera:

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