¿Qué es el Dataísmo? La religión de la información ☝

En tan solo un día, los usuarios de internet publican aproximadamente más de 800 millones de fotografías en Facebook, envían más de 60 mil millones de mensajes a través de WhatsApp, escriben más de 500 millones de tweets, y publican más de 80 millones de fotografías en Instagram, esto sin contar con las demás aplicaciones que existen en este ecosistema.

Todo este contenido que a diario publicamos y consumimos acerca de gustos, preferencias, causas, e información privada, genera un gran volumen de información y datos que se aloja en en el mundo infinito de Internet.

Al mismo tiempo, esto ha generado algunas preguntas, ¿para qué sirve toda esta información?, ¿quién la procesa?, ¿a alguien le interesa? y, la más importante, ¿tiene algún valor?

¿Dejarías que un ordenador decidiera las calorías que debe consumir tu cuerpo? ¿Confiarías en aplicaciones del celular para que te recomendara tu pareja ideal? Los seguidores del dataísmo no lo dudarían.

Aunque a simple vista suena un poco descabellado, todos los que navegamos en la red, tenemos algo de dataístas, pues a diario, consciente o inconscientemente, nos dejamos influenciar de lo que consumimos en la red, siguiendo patrones de nuestros mismos gustos.

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Datos: un poder que nos gobierna en silencio

Al parecer, los datos que fluyen en la red saben más de nosotros que nosotros mismos, y los algoritmos deberían sustituirnos a la hora de tomar decisiones.

El dataísmo no rinde culto a ningún dios: adora los datos. La información es su mandamiento supremo, los algoritmos, sus sagradas escrituras y la Inteligencia Artificial, su sumo sacerdote.

Yuval Noah Harari un historiador y escritor israelí, profesor en la Universidad Hebrea de Jerusalén, en su obra Homo Deus: Breve historia del mañana, habla acerca del Dataísmo que “no venera ni a dioses ni al hombre: adora los datos”. En el libro, Harari argumenta que todas las estructuras políticas o sociales competidoras pueden ser vistas como sistemas de procesamiento y análisis de datos:

Harari plantea que: «podemos interpretar que toda la especie humana es un sólo sistema de procesamiento de datos, siendo cada uno de los seres humanos un chip». Y también predice que la conclusión lógica de este proceso es que con el tiempo los humanos otorgarán a los algoritmos la autoridad para tomar las decisiones más importantes de su vida, como con quién casarse, por ejemplo.

Y continúa: “Todos somos algoritmos. Las máquinas y los seres vivos. Los humanos somos algoritmos orgánicos. Con la información que tenemos, actuamos. Los sentimientos y las emociones son mecanismos bioquímicos que los animales usan para tomar decisiones. Es un cálculo veloz de probabilidades que nos ayuda a sobrevivir. Cuando vemos un tigre, aparece el miedo porque un algoritmo bioquímico calcula que la probabilidad de morir es grande. La química sexual aparece cuando tenemos posibilidades de aparearnos con alguien. Son algoritmos que se han ido perfeccionando a lo largo de cientos de miles de años”.

Sigamos con el dataísmo: ¿qué sigue?

Ahora mismo, la capacidad de procesamiento y almacenamiento y visualización de datos es muy limitada, pero es cierto que ya está bastante avanzada la Inteligencia Artificial y muy pronto se espera que será capaz de almacenar, clasificar y evaluar en tiempo real todos los datos que generamos a diario, elaborando patrones de conducta y creando simulaciones inmediatas basadas en modelos predictivos.y plataformas como Google, Facebook, Outlook o Amazon tienen muy bien identificadas y a la perfección nuestros gustos, costumbres, hábitos, preferencias, conocen nuestros amigos, saben qué leemos, por dónde nos movilizamos, nuestros temas de interés, y hasta nuestra ideología política.El procesamiento de todos esos datos producirá un retrato extremadamente detallado de nosotros mismos, se supone, nos ayudará en la toma de decisiones y permitirá predecir futuras situaciones con márgenes de error mínimos. El dataísmo ya está anunciando en el futuro que viene, un futuro del big data donde estos fluirán con total libertad y donde nuestras decisiones las podrán tomar complejos algoritmos que, ojalá no sustituyan al cerebro humano.

Dataísmo y Big Data: relaciones primarias

El dataísmo y el Big Data están entrelazados en una relación simbiótica que trasciende los límites de la ciencia, la tecnología y la filosofía. El Big Data, como su nombre sugiere, se refiere a la vasta y creciente cantidad de información que se genera, recopila y procesa en la era digital. Por otro lado, el dataísmo es una perspectiva filosófica que postula que la información es el componente central de la realidad y la evolución. Estas dos ideas convergen de manera profunda y transformadora. En el corazón de esta relación está la noción de que el Big Data proporciona la materia prima esencial para comprender y aplicar los principios del dataísmo. A medida que acumulamos cantidades masivas de datos provenientes de diversas fuentes, como sensores, redes sociales, transacciones en línea y más, estamos construyendo un tesoro de información sobre el comportamiento humano, los fenómenos naturales y los sistemas complejos. El dataísmo sostiene que esta información es crucial para desentrañar patrones ocultos, interconexiones y relaciones causales que subyacen en todos los aspectos de la realidad. A medida que aplicamos técnicas avanzadas de análisis de datos, como el aprendizaje automático y la inteligencia artificial, podemos revelar conocimientos profundos que antes eran inaccesibles. Estos conocimientos pueden tener aplicaciones en campos tan diversos como la medicina, la economía, la meteorología, la investigación científica y más. A su vez, el Big Data respalda y valida las premisas del dataísmo. La creciente cantidad de datos disponibles y la capacidad para procesarlos nos muestran el poder de la información para influir en la toma de decisiones, tanto a nivel individual como societal. La automatización y la optimización basadas en datos están moldeando industrias enteras y transformando la forma en que interactuamos con el mundo que nos rodea.

Preguntas frecuentes sobre Dataísmo

El dataísmo y el Big Data están estrechamente vinculados. El dataísmo es una perspectiva filosófica que considera que la información es esencial para entender la realidad y la evolución. El Big Data proporciona la materia prima para aplicar los principios del dataísmo, ya que recopila y procesa enormes cantidades de información. A medida que analizamos estos datos, descubrimos patrones y conexiones que respaldan las ideas del dataísmo.

¿Cuáles son los beneficios del enfoque dataísta en la era del Big Data?

Adoptar el enfoque dataísta en la era del Big Data ofrece numerosos beneficios. Permite revelar patrones ocultos y relaciones en conjuntos masivos de datos, impulsando avances en medicina, economía, ciencia y más. También puede optimizar la toma de decisiones basada en información objetiva. Sin embargo, se deben abordar cuestiones éticas y de privacidad al utilizar el enfoque dataísta en el análisis de datos personales.

¿Cómo enfrenta el enfoque dataísta los desafíos éticos del Big Data?

El enfoque dataísta reconoce los desafíos éticos del Big Data y busca abordarlos de manera responsable. Promueve el desarrollo de algoritmos éticos que minimicen los sesgos y protejan la privacidad de los datos. Además, fomenta la transparencia en el uso de datos y la toma de decisiones basada en información objetiva. El enfoque dataísta nos insta a considerar tanto el poder de los datos como la responsabilidad que conlleva su manipulación.

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