Claves para convertir los gastos hormiga en ahorros y comprar un carro

A veces, el dinero se escapa de las manos sin que te des cuenta. Tal vez es el postrecito o el tintico que te tomas con tus compañeros o una suscripción que casi no usas. Estos gastos, que parecen pequeñitos, al final del mes pueden sumar más de lo que imaginas. 

No se trata de eliminar esos gastos por completo, sino de reducirlos para que el dinero sobrante te ayude a ahorrar para algo más grande, como el carro que siempre imaginaste. Economizar no significa hacer grandes sacrificios; a veces, solo debes  fijarte en los pequeños gastos. 

Piensa en todo lo que podrías hacer si redujeras tus gastos hormiga un 20 %. ¿Comprar un carro nuevo? Acá te mostraremos cómo ese sueño sí es posible de alcanzar. 

¿Qué son los gastos hormiga y cómo afectan tus finanzas?  

Estos gastos son muy variados, pero entre ellos destacan: 

• El consumo frecuente de snacks fuera de casa. 

• Suscripciones a servicios de streaming o revistas digitales que no utilizas con regularidad. 

• Aplicaciones de entretenimiento o productividad con cuotas mensuales.  

• Compras impulsivas en línea. 

• El uso de transporte privado en situaciones donde hay opciones más económicas. 

La clave para convertir estos gastos en ahorros está en la planificación y en el control de gastos personales.  

Si identificas y reduces los gastos innecesarios, liberarás una significativa cantidad de dinero que podrás destinar a metas más importantes. Aunque al principio no parezca mucho, con un ahorro constante y una buena gestión, el monto puede crecer bastante y te permitirá estar más cerca del carro que tanto tiempo has buscado. 

¿Cómo puedes reducir los gastos hormiga?  

Para lograrlo, puedes poner en práctica algunos tips que te ayudarán a reducir esos gastos innecesarios. 

Tip #1: Lleva un registro de todos tus gastos 

Apuntar cada gasto que haces es super importante para reducir tus gastos hormiga. La idea es que al saber exactamente en qué te gastas la plata, te des cuenta de lo que no necesitas y así empezar a ahorrar más.  

Existen varios métodos para llevar este registro. Puedes usar un bloc de notas en el celular, hojas de cálculo, aplicaciones específicas de finanzas personales e incluso cuadernos o agendas de bolsillo. Elige el que te resulte más fácil de llevar. 

Una muy buena opción es la función «Día a Día» de la aplicación móvil de Bancolombia.   

Día a Día permite tener un control total de tus finanzas personales. Allí puedes: 

• Ver todos tus movimientos bancarios, lo que te facilita identificar en qué se te va realmente la plata. 

• Definir presupuestos personalizados de acuerdo a tus metas de ahorro.  

• Crear «bolsillos», que permiten establecer apartados para separar tu dinero. Por ejemplo, crear un bolsillo para las vacaciones o uno para ahorrar y comprarte un carro.  

Tip #2: Establece un presupuesto limitando gastos innecesarios 

Un presupuesto bien definido te muestra claramente cuánto dinero tienes y cuánto sale de tu bolsillo. Cuando ya sabes exactamente lo que ingresa y lo que gastas, es hora de ajustar los números para reducir esos gastos innecesarios. Para ello: 

• Separa los gastos fijos de los que son por gusto. Esto te da una visión clara de dónde puedes recortar. 

• Decide qué gastos son realmente importantes para ti. Quizás una suscripción a un servicio de streaming es relevante, pero ¿necesitas cuatro? Escoge lo esencial y lo que realmente usas. 

• Para las categorías de gastos no esenciales, pon un límite. Esto te ayuda a darte gustos sin pasarte del presupuesto. Por ejemplo, si compras snacks, hazlo solo una o dos veces a la semana.  

Tip #3: Busca alternativas más económicas  

¿Y si te pones en la tarea de encontrar los mismos servicios y productos, pero a un menor precio? A veces, cambiar ciertos hábitos de consumo puede tener un gran impacto en tus finanzas personales al reducir los gastos mensuales. 

Por ejemplo:  

• Lleva frutas o barras de cereal al trabajo para no comprar snacks. 

• Cocina en casa en vez de comer en restaurantes. 

• Al pedir a domicilio, compara precios entre apps. 

• Busca alternativas más baratas para las compras habituales. Por ejemplo, compra botellas de agua reutilizables para llenarlas en casa. 

¿Cómo lograr la meta de comprar un carro? 

Para transformar tus ahorros en la cuota inicial de tu próximo carro, necesitas un plan de acción claro y concreto. Aquí te mostramos cómo puedes alcanzar ese objetivo paso a paso: 

1. Calcula cuánta plata y tiempo necesitas  

Sigue estos pasos al momento de diseñar tu propio plan: 

• Investiga el costo del vehículo que te gusta. 

• Calcula la cuota inicial. Si el carro cuesta $40.000.000 pesos y necesitas un 15 %, serían $6.000.000. 

• Divide el total entre los meses que faltan para tu fecha objetivo. Por ejemplo, si quieres comprarlo en 18 meses: 

$6.000.000 / 18 meses = $333.333 al mes 

Esto significa que necesitarías ahorrar $333.333 al mes durante los próximos 18 meses para reunir los $6.000.000 de la cuota inicial.  

Tener un número concreto te permite mantenerte enfocado y no gastarte los pesos en otras cosas. 

¿Tienes dudas sobre la compra de un carro usado? Resuélvelas aquí. 

2. Destina el dinero para alcanzar tu meta  

Para aprender cómo ahorrar y comprarte un carro usado tendrás que mantener la disciplina y no perder de vista tus metas. Si tienes un objetivo claro, es más sencillo resistir la tentación de gastar en cosas innecesarias y destinar esos recursos hacia lo que llevas persiguiendo durante mucho tiempo.  

Piensa en esto: tu meta es ahorrar $6.000.000 para la cuota inicial de tu carro y gastas $450.000 al mes en gastos hormiga; eliminarlos te permitirá alcanzar tu objetivo en 13 meses y medio: 

$6.000.000 / 450.000 = 13,5 meses 

Esto es mucho más rápido que si siguieras gastando en cosas que no necesitas. 

Evalúa opciones de financiamiento 

Para tener una mejor idea de lo que necesitas y planificar mejor tu compra, ¿por qué no revisas las opciones disponibles en el mercado? En Tu360Movilidad no solo encontrarás una amplia variedad de carros nuevos y usados. También tienes la opción de pedir un préstamo vehicular para comprarlo. Explorar estas alternativas te permitirá tener una visión clara de los precios y calcular cuánto necesitarás para la compra. 

Además, puedes usar nuestro simulador de crédito para calcular cuánto sería tu cuota mensual. Esto te ayudará a entender mejor cómo encajarían los pagos en tu presupuesto cada mes. 

¿No sabes qué carro comprar según tus necesidades? Descúbrelo en nuestro cuestionario. 

Conclusiones 

Convertir esos gastos diarios en ahorros para objetivos mayores, como la compra de un carro, es una táctica súper eficiente para manejar tus finanzas. Se trata de aprender a identificar qué compras son realmente necesarias y cuáles no, lo que al final mejora tu salud financiera.  

El gran reto es resistir las pequeñas tentaciones cotidianas y mantener el foco en lo que realmente quieres. Considera esto como un ejercicio de paciencia y constancia, donde cada ahorro, por más pequeño que sea, te acerca progresivamente a ese carro que tanto deseas.