La música como puente hacia el bienestar y las emociones

La música es nuestra compañía. Escuchar una canción en un momento triste nos puede hacer sentirnos acompañados e incluso comprendidos. Mientras que, si estamos felices y la compartimos con los demás, conectamos con ellos a través del baile, de la alegría y de los buenos momentos.

Por eso, en este videopódcast de A dos grados, exploramos el bienestar que nos aporta en una conversación íntima con tres maestros: Saúl Morales, Juan Andrés Rodríguez y John Freddy Rojas, quienes hacen parte de la Orquesta Filarmónica de Medellín y viven de cerca cómo el poder de su arte transforma la forma en la que miramos y sentimos la vida. Te invitamos a ver el vídeo y conectar con sus historias.

Para estos músicos profesionales, la música funciona como un analgésico gratuito que no es inaccesible ni complejo de conseguir. Y si lo piensas, seguramente recordarás al menos un momento en el que una canción te ayudó a expresar lo que sentías o a entender de dónde venían esas emociones que a veces son tan difíciles de comprender.

Pero los beneficios de la música no paran ahí. Así no seas músico profesional, si le prestas atención al ritmo o las letras, encuentras en las canciones o en los conciertos un momento para estar presente. Son instantes que te invitan a calmarte, a poner tus cinco sentidos en lo que estás viviendo e incluso a pensar o reflexionar en medio de momentos de quietud.

La música también es un elemento que hace parte de tu identidad. Los géneros que te gustan no te definen, pero sí te acercan a otras culturas y personas con una perspectiva diferente a la tuya, y es gracias a esas canciones que puedes conocer a través de tus oídos las regiones de tu país o incluso del mundo. Sin la cumbia, el joropo, la salsa o el rock, no podríamos disfrutar de tantas melodías y tradiciones, que conforman lo que nos une como colombianos.

Ahora piensa en las fiestas, en tus amigos o en tu familia. Tal vez recuerdes lo mucho que disfrutas bailar en diciembre y cómo hay una canción que te recuerda tu época en el colegio o el paseo de olla que hiciste con tu parche. Esa es otra de las formas en que la música tiene un impacto directo en nuestro bienestar: fortalece las conexiones con nuestra red de apoyo e incluso nos hace sentir más cercanos a ellos y a los momentos compartidos.

¡No te pierdas este episodio! Dale play ahora al videopódcast de A dos grados y descubre cómo la música te conecta con el presente y te recuerda que estamos vivos.