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Cuenta la leyenda que el rey de India, Sheram, había perdido a su hijo en una de sus batallas. Por eso estaba bastante deprimido y parecía que nada podía devolverle la alegría. Acá va una historia muy interesante y divertida.
Cuenta la leyenda que el rey de India, Sheram, había perdido a su hijo en una de sus batallas. Por eso estaba bastante deprimido y parecía que nada podía devolverle la alegría. Acá va una historia muy interesante y divertida. Luego que Sheram el rey de la India perdiera a su hijo en una batalla, este entró en una gran tristeza y consternación, pero un día un individuo conocido como Sissa apareció en su corte con un juego de mesa bastante peculiar y solicitó una audiencia para mostrárselo al rey. El juego de mesa era el ajedrez. Sissa le mostró al rey las 64 casillas con las diferentes figuras y sus movimientos. El rey Sheram muy emocionado le dijo al Sissa que en recompensa por haberle mostrado el juego podía elegir cualquier cosa. Sissa, después de meditar su respuesta le contestó al rey que quería un grano de arroz por la primera casilla del tablero. Dos granos por la segunda, cuatro por la tercera, y así sucesivamente hasta completar las 64 casillas que tiene el tablero. El rey Sheram pensó que esto era una ganga y accedió inmediatamente. Le pidió a la gente de la corte que hiciera los cálculos correspondientes y le pagaran a Sissa. Pero, cuando hicieron los cálculos, se dieron cuenta que ni todo el arroz que se producía en el reino alcanzaba siquiera para llegar al monto calculado. Para que tengan una idea de la progresión, en el primer cuadro Sissa recibiría un grano de arroz, en el segundo dos, en el tercero cuatro……en el décimo, la cantidad era de 512, pero para el cuadro número 20, eran 524,288 granos, en el 30, eran 536,870,912, y en el 40, la cantidad pasaba los 549 mil millones de granos de arroz. Pero en ese momento Sissa renunció a la recompensa que había solicitado dado que tenía suficiente con haber conseguido que el rey volviera a estar feliz (Historia Popular). Este relato nos deja una lección muy interesante. Aunque Sissa apenas empezó con un premio de 1 grano de arroz en la primera casilla, como su recompensa se duplicaba al avanzar por el tablero, al cabo de un tiempo sus ganancias eran inimaginables. Si Sissa no hubiera pedido duplicar su ganancia en cada casilla, sino que esta sólo aumentara un 5% en cada paso, en la casilla 16 tendría 2 granos y al final de las 64 casillas llegaría a 22 granos de arroz. Si en lugar de arroz pensamos en dinero esto quiere decir que si invertimos $1 millón de pesos hoy a una tasa de interés del 5%, dentro de 16 años nuestro dinero se habrá duplicado. Este es el poder del interés compuesto. Si empezamos a invertir $500.000 pesos mensuales cuando tenemos 20 años, cuando cumplamos 60 años tendremos casi $800 millones en nuestra cuenta de inversión usando una tasa conservadora de interés del 5%. Aunque las tasas cambian todo el tiempo hoy en día hay inversiones seguras al 15% o al IPC + 5% lo que mejoraría notablemente nuestro retorno en el largo plazo. Uno de los factores más importantes al invertir es el tiempo. Entre más tiempo permanezca nuestro dinero invertido, más podemos aprovechar el poder del interés compuesto. El mejor momento para empezar a invertir es ahora.
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