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El hidrógeno es uno de los componentes que se posiciona para liderar la transición energética en Colombia. Te contamos sobre sus ventajas.
Colombia se ha puesto la meta de avanzar en la generación de energías más limpias y en ese camino son de resaltar las incursiones que se vienen realizando en materia de energía eólica y la solar.
No obstante, desde el año pasado se formalizó en el país ‘La hoja de ruta del hidrógeno (H2)’ que, al igual que las anteriores, busca generar una alternativa distinta para minimizar en el mediano plazo la dependencia de los combustibles fósiles.
“El hidrógeno es el elemento más sencillo y ligero de la tabla periódica y su versatilidad como materia prima industrial, combustible y vector energético para el almacenamiento y transporte de energía, permite un gran número de aplicaciones, algunas de las cuales no se han desarrollado completamente aún”, señala el documento publicado por el Ministerio de Minas y Energía.
Se calcula que a 2050, la demanda mundial del hidrógeno será de aproximadamente 525 millones de toneladas. En ese contexto, Europa, Japón y Corea serían algunos de los mayores importadores de hidrógeno.
Su auge en el mundo es consecuencia de las ventajas que proporciona a diferencia de otras fuentes de energía:
El hidrógeno no tiene emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) directas durante su uso final ni prácticamente ninguna otra emisión contaminante.
Dada su reactividad, el hidrógeno no suele presentarse aisladamente en la naturaleza teniendo que extraerse a partir de agua, hidrocarburos o biomasa.
En función del proceso de producción del hidrógeno y de la fuente de energía primaria empleada, variarán las emisiones de CO2 asociadas.
Aunque se plantee la hoja de ruta como una guía para el hidrógeno, es importante destacar que este compuesto tiene varias subclases que clasifican el nivel de energía limpia. En los últimos años, se ha venido utilizando y desarrollando un código de colores que simplifica la clasificación del hidrógeno según la fuente de energía que se usa para producirlo. Las etiquetas de color más conocidas son:
Hidrógeno gris: producido a partir de combustibles fósiles, principalmente gas natural y carbón, sin subsecuente captura y almacenamiento de carbono.
Hidrógeno azul: es el producido a partir de fuentes fósiles que incorporan captura y almacenamiento de emisiones de CO2.
Hidrógeno verde: es el que se denomina hidrógeno renovable. A este se le define como el hidrógeno producido a partir de Fuentes No Convencionales de Energía Renovable (FNCER), tales como la biomasa, los pequeños aprovechamientos hidroeléctricos, la eólica, el calor geotérmico, la solar y los mareomotriz, entre otros.
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A nivel general las posibilidades del país para integrarse al mercado naciente del hidrógeno son muy optimistas, como asegura César Arturo Soler Franco, especialista de Negocios, Maquinaria y Equipo de Bancolombia.
“En primer lugar, las reservas de petróleo, gas natural y carbón garantizan una condición autosuficiente con un gran potencial de excedentes en carbón e hidrocarburos los cuales pueden ser utilizados para producir hidrógeno azul o de bajas emisiones mientras se consolida una transición plena hacia el desarrollo del hidrógeno verde”, explicó el experto.
Otra de las ventajas, de acuerdo con el Ministerio de Minas y Energía, es que Colombia dispone de recursos para la generación renovable equiparables a algunas de las mejores zonas a nivel mundial. “Por un lado, su oferta hídrica es seis veces el promedio mundial y tres veces el de Latinoamérica. Su orografía y régimen pluviométrico presenta condiciones óptimas para la generación hidroeléctrica en gran parte del territorio nacional llegando a suponer el 70 % de la generación eléctrica del país”.
Adicionalmente se expone que Colombia se encuentra ubicado en un enclave geográfico estratégico. Nuestro país es el nexo entre América Central y América de Sur estando unido mediante redes de transporte, distribución y comercio con otros cinco países.
De acuerdo con la ‘Hoja de ruta’, “Colombia presenta también una red de gaseoductos de transporte de gas natural de más de 7.500 km de longitud y una red de distribución que abastece una demanda nacional de 911 mpcd (millones de pies cúbicos día). Esta red podría ser reacondicionada si fuera necesario para el transporte y distribución de hidrógeno en los tramos que conecten los centros de producción y demanda”.
Para 2030, Colombia planea convertirse en un referente de producción de hidrógeno verde en América Latina y para conseguirlo ya empezó con los primeros avances. En marzo de 2022, se inauguraron en la Refinería de Ecopetrol y en la Estación Heroica, de Promigas, los dos primeros pilotos de generación de este compuesto en Colombia.
El objetivo, como explicó en su momento el gobierno de Iván Duque, es que el hidrógeno verde aporte el 15 % de la energía del país. Para ello se desarrollará entre 2 y 3 gigavatios (GW) de electrólisis para la producción de hidrógeno de cero y bajas emisiones en los próximos 10 años, con inversiones cercanas a los USD5.500 millones y la creación de entre 7.000 y 15.000 empleos.
“En el tercer trimestre finalizó exitosamente la prueba piloto para la producción de hidrógeno verde en la Refinería de Cartagena. Los aprendizajes obtenidos en la prueba podrán ser incluidos en los proyectos de gran escala. Actualmente, el electrolizador pasó a ser parte de los activos industriales de Esenttia, para proveer entre el 8 % y 10 % del hidrógeno requerido en sus procesos industriales”, explicó Felipe Bayón, presidente de Ecopetrol en la entrega de los últimos resultados trimestrales de la compañía.
Ecopetrol dio a conocer que en 2022 se desplegaron cerca de USD150 millones en proyectos para la transición energética entre los cuales se encuentra el hidrógeno.
Además, la compañía más grande de Colombia destacó que ya están en camino un segundo y tercer electrolizador para complementar la producción del hidrógeno en Colombia. “Uno para el Centro de Innovación y Tecnología de Cartagena y el que viene de España, para el proyecto piloto de movilidad sostenible con Fanalca para mover el primer bus ensamblado en Colombia para moverse con hidrógeno”, especificó Bayón.
En línea con lo anterior, Soler, el experto Bancolombia dice que la normativa e incentivos que se vienen suministrando alrededor del tema del hidrógeno no son cosa menor, por eso explica algunos de sus beneficios:
La Ley 2099 de 2021 precisa las definiciones del hidrógeno verde y azul como fuentes no convencionales de energía y dicta algunas de las disposiciones para definir los mecanismos.
En el Decreto 895 de 2022 se reglamentaron los beneficios tributarios para los proyectos de hidrógeno verde y azul, donde se incluyen los proyectos aplicables a la deducción del impuesto de renta, beneficio por exención de arancel y depreciación acelerada.
En la Ley 2169 de 2021 se declaró de utilidad pública e interés social de los proyectos y/o ejecución de obras para la producción y almacenamiento de hidrógeno verde.
Te recomendamos leer: > Potencial del hidrógeno en Colombia para lograr la carbono-neutralidad > Avances y retos en la transición energética de Colombia > Energía: uno de los factores dinamizadores de los mercados del futuro Fuentes:
“Hoja de ruta del hidrógeno”, Ministerio de Minas y Energía de Colombia, 2021.
“Cartagena como centro industrial de hidrógeno bajo en carbono”, Ministerio de Minas y Energía, junio 2022.
“Resultados financiero Ecopetrol – tercer trimestre de 2022”,Ecopetrol, noviembre de 2022.
“Ecopetrol anuncia inversiones para producir más hidrógeno”, El Universal, 22 de noviembre de 2022.
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